El ilustrador Siegfried Woldhek estudió la obra de Da Vinci. Los autorretratos de pintores contemporáneos a Leonardo, demuestran que al solo tener espejos, solo podrían pintar sus rostros de frente o de 3/4 de perfil. A partir de ese criterio descartó 700 obras del renacentista que tuvieran los rostros que no cumplieran dicho criterio. Se supo que Da Vinci era atractivo por lo que se descartaron los rostros poco detallados o poco atractivos.
Sorprendentemente quedaron 3 rostros cuyos rasgos corresponden entre sí. La cronología entre los tres rostros son acordes a la edad del renacentista cuando los pintó. Miren este video para seguir esta impresionante investigación.
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